1. El infierno: A flor de piel, reconoces tus miserias y todos tus problemas chorrean sobres la mesa. Abrir heridas que parecían cerradas y reconocer lo dañado que uno se encuentra. Sentirse aturdido, preocupado, cuál un niño indefenso. El mal humor y la sensibilidad abunda en estos días.
2. El purgatorio:La batalla, enfrentamiento, luchas internas. Resolver las dudas y sanar las heridas. Perdonarse y mantener la frente en alto. Guerras internas, más que entender, resignar y masticar. Reconocerse.
3. El cielo: el final del camino. El Alta del enfermo. Encontrar lo que se busca, lograr el objetivo. La vida misma. Aceptarnos. Nuestros principales adversarios, nuestros principales jueces y nuestros principales ajusticiadores. Nuestro nuevo yo.
Como fan de la terapia, de todas las actividades mentales y adicta al análisis, investigación y razonamiento. Del autoconocimiento y del todo tiene un porqué vamos con esta. El problema es que luego de pasar por todos los círculos podemos quedar un poco abrumados ante tanta información. ¿Qué sigue? .... más terapia. Pero algo mas conductual, una cognoscitiva quizá. (Mi favorita)
Caminante que hace camino al andar, con el bastón que Virgilio nos viene a dar. Porque el bastón, se va haciendo cada vez más liviano y lo tenemos que soltar, empacarlo en la mochila. Esta mochila al igual que la que hacemos cuando tenemos alarma de temblores, tiene todo lo necesario y básico para sobrevivir ante cualquier desastre. Esa que nos dan las herramientas de la terapia para llevar lo que queda.... del primer día del resto de nuestras vidas.
3. El cielo: el final del camino. El Alta del enfermo. Encontrar lo que se busca, lograr el objetivo. La vida misma. Aceptarnos. Nuestros principales adversarios, nuestros principales jueces y nuestros principales ajusticiadores. Nuestro nuevo yo.
Como fan de la terapia, de todas las actividades mentales y adicta al análisis, investigación y razonamiento. Del autoconocimiento y del todo tiene un porqué vamos con esta. El problema es que luego de pasar por todos los círculos podemos quedar un poco abrumados ante tanta información. ¿Qué sigue? .... más terapia. Pero algo mas conductual, una cognoscitiva quizá. (Mi favorita)
Caminante que hace camino al andar, con el bastón que Virgilio nos viene a dar. Porque el bastón, se va haciendo cada vez más liviano y lo tenemos que soltar, empacarlo en la mochila. Esta mochila al igual que la que hacemos cuando tenemos alarma de temblores, tiene todo lo necesario y básico para sobrevivir ante cualquier desastre. Esa que nos dan las herramientas de la terapia para llevar lo que queda.... del primer día del resto de nuestras vidas.
C.
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