El 2006, fue un año de extremos, no cabe duda. Comenzó aburridisimo y termina con tristeza, porque se cierran muchos círculos.Comenzó muy caluroso, comenzó un poco angustioso, comenzó rutinario, comenzó sobre la arena, comenzó en una fiesta, comenzó cerca al mar, en la playa.
En el medio, encontré un trabajo que me dura mas de lo q esperaba, que me hizo más sabia, que me hizo conocedora de un mundo que cada vez me apasiona más, me dió amor, me dió emoción, me puso al borde de la muerte, me rompio la rodilla, me dió nerviosss, me dió llanto, me dió alegrias, me dió sangre, me dió uno, me dió dos, tres, me dio orgullo, me dio felicidad y me dió ese algo que mezcla todo que no se explicar.
En 3 meses pasaron quizá el 70% de todo, mi papper, mis angustias de cursos, el taxista, el rompimento, sorpresas, y el fin de la era LAN, no más pasajes, no más viajes, no más dinero, no más dar las cosas por sentado, no más alucinarme la tapa del water, no más la niña de papá, no más esperanzas locas, no más depender, soy solo yo, yo nací sola y así debe ser. Tengo trabajo, panza, comida, casa, salud, mucha locura y todo por delante, pero bueno es de otra manera. Estos tres meses de casi puro golpe sirven para algo. Para cerrar ciclos, para dejar de llorar y para ponerme a pensar que la vida me dice algo y que ese algo es crece niña, pisa mas tierra todavia y deja de webear, lucha poco a poco por lo que de verdad quieres y basta de dejar todo a la deriva, asencillate, haste más fuerte y sigue el camino.
Faltan aún 16 días para que se termine el año. En una semana exactamente cumplo 23, a esa edad mi mamá estaba casada y me tenia a mi, n más responsabilidades de las que tengo yo aesta misma edad que son quizá reportarme e ir a trabajar y estudiar a grosso modo. Todavía no se termina el año, pero haciendo un balance no sé me duele mucho todo, pero se que al final será todo mejor.
Como decía un amigo crecer duele, no crecer duele más y oh si esos golpes en lugar de ponerte a chillar deben hacerte crecer, duele pero creeme duele menos que seguir llorando porque te quitaron tu paleta de colores favoritos justo cuando la ibas a lamer.
C.